Carencia de yodo en el embarazo

Es la causa más importante y fácilmente prevenible de daño cerebral en el feto y l recién nacido

El pescado
El pescado constituye una de las principales fuentes de yodo

Según especialistas hay una asociación entre las carencias de yodo en la alimentación de la madre durante el embarazo y la lactancia y las lesiones cerebrales y las enfermedades de tiroides en el bebé.

El yodo en la alimentación de la embarazada

El yodo es un micronutriente esencial, ya que su función es fundamental para el crecimiento y desarrollo cerebral del niño. Interviene en la síntesis de hormonas tiroideas, que participan en el desarrollo cerebral, crecimiento y regulación del metabolismo.

Consecuencias de la deficiencia de yodo en el niño:

Según un estudio desarrollado por la Universidad de Bristol realizado en embarazadas, existe una relación muy directa en las carencias de yodo en la madre y el desarrollo cognitivo de los niños. Para el mismo, se tomaron muestras de orina en las embarazadas y se analizaron las concentraciones de yodo en ellas. Posteriormente se realizó un seguimiento mediante pruebas de neurodesarrollo y evaluación de diferentes habilidades cognitivas de los niños a la edad de 8 y 9 años. El resultado hallado es que existe una diferencia de tres puntos en el coeficiente intelectual entre los niños nacidos de madres con carencias de yodo en los primeros meses del embarazo y los de madres con niveles de yodo normales y altos.

Entre otras alteraciones por deficiencia de yodo en el bebé están:

  • Bocio Neonatal
  • Hipotiroidismo Neonatal

Recomendación de los expertos

Las necesidades diarias mínimas de yodo en el bebé son:

  • Entre 250 y 300 en el embarazo y la lactancia
  • 50 microgramos diarios desde el nacimiento hasta los 12 meses
  • 90 microgramos diarios entre 1 y 6 años
  • Entre 120 y 150 microorganismos diarios en la adolescencia y edad adulta
    • Los especialistas recomiendan una ingesta diaria de entre 250 y 300 microgramos de yodo en las mujeres embarazadas para cubrir las necesidades del bebé que se esta desarrollando dentro del útero.

      Las principales fuentes naturales de yodo las constituyen: El pescado, los mariscos y los lácteos, sal yodada.

      Como puede resultar difícil cubrir solamente con alimentación los requerimientos diarios de yodo, el médico puede indicar algún suplemento durante esta etapa.

      Según la Organización Mundial de la Salud (OMS):

      El problema de la enfermedades por Deficiencia en Yodo afecta en el mundo a 740 millones de personas .Causa alteraciones cerebrales, cretinismo (una forma grave de déficit mental), abortos y bocio. Es en el mundo la más importante causa de retraso mental y la más fácil de prevenir.