¿Cómo afecta la violencia de los medios de comunicación a los niños?

Los vuelve más agresivos, insensibles y temerosos del mundo que los rodea

Educación - Violencia en los medios de comunicación

Decir que los medios masivos de comunicación tienen una gran influencia en el desarrollo de los niños no es una novedad para nadie, el caso es que ésta puede ser positiva o negativa y en el caso que convoca aquí, es particularmente nociva. Si bien son muchos o varios los medios que afectan negativamente a través de su contenido violento a los niños, la televisión es la vedette por ser uno de los más antiguos en comparación con los videojuegos y la Internet, por ejemplo. Los niños pasan frente a la TV, la mayor parte de su tiempo libre (un niño norteamericano tipo ve cerca de 28 horas semanales de televisión y vio alrededor de unos 8000 asesinatos al terminar la primaria).

Varias investigaciones han dado muestras claras de que ver violencia en la televisión tiene un efecto perjudicial en los niños y sobre todo, que fomenta los comportamientos violentos, por ello en 1992 la Asociación Psicológica Americana publicó un informe en el que confirmó la existencia de una estrecha relación entre violencia emitida por la televisión y la agresividad en los niños.

Algunos de los efectos de la exposición de los niños a la violencia de los medios:

  • El estar expuestos continuamente a la violencia de los medios masivos de comunicación, puede volver a los niños más insensibles, indiferentes, inmunes a la violencia, al sufrimiento y al dolor de sus semejantes en la vida real. Algunos estudios demostraron que la exposición frecuente a la violencia en los medios reduce las reacciones emocionales de los niños, así como su preocupación por socorrer a alguien que necesita ayuda. De alguna manera, el volverse impasibles ante la violencia, anestesiados, tolerantes ante todas sus expresiones, hace que se la valide, se la acepte, favoreciendo así, futuras actitudes violentas
  • Puede volverlos más temerosos e inseguros del mundo tan peligroso y violento que, según ven diariamente en los medios de comunicación, los rodea. Ya que actualmente hasta los noticieros televisivos se han transformado en shows en los que el morbo está a la orden del día, por ello dedican gran parte de su tiempo a emitir noticias cuyas imágenes son altamente violentas, en las que priman los robos, los asesinatos, los abusos sexuales, etc., generando una gran sensación de inseguridad y miedo entre los televidentes que repercute también en un aumento de la agresividad como mecanismo de defensa
  • Puede volverlos más proclives a tener comportamientos violentos, agresivos y dañinos con sus semejantes (de acuerdo a datos arrojados por algunos estudios realizados, entre otros, por los psicólogos Eron Leonard y L. Rowell Huesmann, los niños que pasaban muchas horas frente al televisor viendo programas cuyo contenido era violento, mostraban un nivel mayor de agresividad en la adolescencia). Los niños aprenden mucho por imitación y si sus personajes preferidos de la TV, aunque sean buenos, para luchar contra el enemigo utilizan la violencia, éstos la internalizan como algo válido
  • Los niños que están expuestos a la violencia permanente de los medios masivos de comunicación internalizan y aceptan la pelea, la violencia física y verbal y la agresión, como el único mecanismo válido para resolver sus conflictos

Responsabilidad de los padres

Si bien los padres no pueden aislar a sus hijos del mundo y hacerlos vivir dentro de una burbuja, si pueden protegerlos y preservarlos de algunas cosas, entre ellas, de los efectos nocivos de la exposición prolongada a los medios masivos de comunicación, especialmente de la televisión. Regular, limitar y controlar el tiempo y los contenidos que el niño ve en los medios, es responsabilidad exclusiva de los padres.